Hace tiempo que estar en una banda implica no solo crear y tocar en directo, sino también comunicarlo a través de las redes y menguar así la distancia entre banda público, esa gente que espera al otro lado y a la que se lo debes todo.
Lxs que seguís nuestras redes os habréis dado cuenta del detalle: no hemos subido nada en toda la semana. No es un apagón digital, es un bloqueo emocional por lo vivido el pasado domingo en Kobetamendi. Todavía seguimos en una nube con lo acontecido en una noche que todo indica será recordada colectivamente como un hito.
Cuando no sabes cómo agradecer tanto cariño recibido, cuando te vas a la cama recordando cómo 20.000 personas han sonreído, llorado, coreado, han gritado, saltado con tus canciones… a veces es mejor callar.
Cuando hasta 15 artistas que admiras se unen a esta pequeña caravana ambulante que es BTX y surge el milagro de la música en directo y tus canciones vuelan todavía un poquito más alto; cuando sientes ese orgullo por una crew que se deja la piel para que nada falle cuando todo el mundo mira, a veces es mejor no decir nada. Cuando una simple mirada cómplice mientras estás tocando es suficiente para corroborar que sí, que ha merecido la pena todo el esfuerzo, ¡vaya si lo ha merecido!
Cuando miras al lateral del escenario y ves a esa gente que ha creído en esta historia desde el minuto uno, mucho antes de que ese polígrafo gigante que es el tiempo diera y quitara razones, cuando todo era la nada, cuando todo sonaba a quimera y los techos se veían como de cristal doble macizo.
En ocasiones como esta, es mejor callar. Abrir la boca solo para dar las gracias a todxs lxs que lo han hecho posible. Y a por la siguiente.
Ya lo dijo Kase O: la mejor promo es hacerlo bien. No hay más objetivo que ese.
Jaio.Musika.Hil.
(Foto: Gaizka Peñafiel)
